Cripta de San Mauro

Interno della Cripta di San Mauro

Cripta de San Mauro

La cripta de San Mauro está actualmente ubicada debajo del altar del Santuario de San Antonio de Padua. El lugar del culto fue con toda probabilidad usado en un primer momento ( Edad Media Alta) por los monjes Basilios que oficiaban con rito griego y luego con la conquista normanda-aventura del año 1055- fue utilizada por los monjes benedictinos. Los monjes basilios dedicaron el edificio a San Basilio y a continuación los benedictinos lo dedicaron a San Mauro. Una vez olvidada la cripta fue descubierta nuevamente por un pastor en 1660 e inmediatamente el canónico oriano Lucio Riccardia quiso edificar sobre la iglesia. A lo largo del siglo XVII además de ser usada como un lugar de culto, posteriormente fue usada como osario por los frailes alcantarinos que se habían adueñado de la iglesia y del monasterio anexo. La forma de la cripta es rectangular. En su interior, a pesar de las actuales condiciones aún son visibles algunos frescos: el central representa a San Mauro, a la derecha esta la llamada Virgen de la Granada, de excelente mano de obra, mientras a la izquierda se encuentra el fresco más pequeño que representa el Cristo coronado de espinas, la Virgen de Constantinopla y San José.