La corte de Federico II

Leonardo Fibonacci

Leonardo Fibonacci

La sed de saber más hace que Federico II hospede en su corte a importantes personalidades de la cultura. Gracias a su iniciativa se deben las traducciones de obras de la tradición filosófica, griega y árabe hasta entonces desconocidas, en modo particular la de Aristóteles. Posteriormente Federico mantiene relaciones con el célebre matemático Leonardo Fibonacci con conocimientos y sabiduría hebrea, árabe y griega. Una personalidad de gran auge que le acompaña es la de Pier delle Vigne, que fue un íntimo colaborador y portavoz. Favoreció la escuela poética siciliana y el mismo compone poesías amorosas. Coleccionó esculturas y herencias antiguas y se hizo reproducir copias de obras del pasado; además siguió personalmente el proyecto de la “Porta di Capua” un monumentos rico en referencias de la antigüedad romana, dado que en la entrada del reino tenía que dar testimonio acerca de los valores a los cuales se inspiraba su monarquía. Creó un reino, una red de castillos debido a la exigencia de controles, pero lo hizo también para poder favorecer sus pasatiempos como por ejemplo la caza.